Estamos a mediados del año, y la temporada de verano está por llegar. Para celebrar, le damos un vistazo a las tres piedras natalicias oficiales de Junio: la perla, la alexandrita y la piedra de luna. ¿Buscas el perfecto regalo para un cumpleaños de Junio? Escoge una de estas hermosas y diferentes gemas, y tu amiga o ser querido definitivamente lo amará.
Piedra natalicia de Junio: la Perla
La piedra natalicia más común para Junio es la perla. Su nombre deriva de la palabra latina pirum, que significa pera, dada su forma. Esta gema es bastante única, ya que se forma dentro del cuerpo de algunos moluscos cuando un parásito externo entra en su cuerpo y es cubierto con nácar. Sin embargo, hoy en día la mayoría de las perlas son creadas en laboratorios utilizando los caparazones de los moluscos.
Las perlas pueden encontrarse en océanos o ríos, y pueden tener muchos colores diferentes, desde un color blanco pálido y cremoso, hasta tonos más inusuales, como amarillo, verde, morado, gris, e incluso negro.
Las perlas simbolizan lealtad, riqueza y pureza, y han sido utilizadas con propósitos medicinales por siglos. De acuerdo al poema de la piedra natalicia:
Piedra natalicia de Junio: la Alexandrita
La segunda piedra natalicia más popular de Junio es la Alexandrita, una gema excepcional que tiene la habilidad de cambiar de tonos de acuerdo al tipo de luz a la cual es expuesta: adquiere un color verde en la luz del día o la luz fluorescente, y se torna a un morado rojizo en la luz incandescente. La alexandrita debe su nombre al zar Alexander II, en cuyo reinado se descubrió.
Esta gema se encuentra en parte de África y Rusia, y sus propiedades han sido imitadas en gemas sintéticas. Fue especialmente popular en Rusia, ya que reflejaba los colores nacionales del país.
Piedra natalicia de Junio: la Piedra de Luna
La última piedra natalicia de Junio de la Piedra de Luna, una gema sorprendente que tiene un color plateado y contiene manchas de otros tonos, las cuales la hacen parecer un rayo de luz lunar. El historiador romano Plinio creía que la piedra de luna cambiaba de colores y apariencia de acuerdo a las fases de la luna, y los romanos también creían que se relacionaba a la diosa Diana.
En la cultura hindú, se creía que la piedra de luna contenía un espíritu que traía buena suerte a quien la usaba. Puede encontrarse en Australia, India, Mayanmar, Sri Lanka y los Estados Unidos.
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